El año 2020 significó un gran reto profesional, no solo por le gran cambio que sufrió todo el sistema educativo, sino también porque fue mi primer año como docente. Todo lo que había aprendido estaba enfocado en las clases presenciales, y. obviamente, las prácticas que realicé con anterioridad fueron de la misma manera, por lo que fue un enorme reto el poder, por un lado conocer a mis estudiantes, y por otro, el poder adaptar todo lo aprendido a la modalidad online. Aunque sin duda el mayor reto fue el nivel de vulnerabilidad socioeconómica de los estudiantes, se debió comenzar realizando una alfabetización digital de estos, ya que todo era absolutamente nuevo para ellos, poco a poco se fue probando diversos métodos hasta lograr llegar a una modalidad de trabajo que diera resultados. Se trabajó principalmente con Classroom y Google Form, utilizando la clase invertida, los estudiantes debían realizar pequeñas actividades antes de iniciar cada clase y luego de estas, aunque en un inició costó bastante que ellos realizaran estas actividades, ya que al no ser una evaluación sumativa no lo sentían necesario, pero poco a poco se logó ir aumentando la participación de los estudiantes.