Creo que merecen homenajes una gran diversidad de valores y
símbolos, sobretodo los más presentes en la memoria histórica
colectiva.
La historia de Chile en todas sus etapas tiene mucho que rescatar,
por más reduccionismos y simplificaciones que existan.
Tan importante en su momento fue Inés Suárez como lo fue Gabriela
Mistral, así como José M. Carrera y el Presidente
Allende.
La monumentalidad debe reflejar nuestra historia y riqueza
cultural, y en cuanto a esto estamos en deuda con los pueblos
indígenas.