Incitación al diálogo.
La figura de Gabriela Mistral ha sido objeto de diversas
significaciones a lo largo de nuestra historia: la maestra, la
madre, la mujer severa y poco atractiva y, actualmente, la
emblema del feminismo y la disidencia sexual.
¿Por qué ocurre esta resignificación con la Mistral, y no con
otros próceres? ¿Qué otros personajes de nuestra historia podrían
formar parte de un nuevo panteón de próceres en el espacio
público?
En relación al planteamiento de la pregunta, es cuestionable que
actualmente Gabriela Mistral sea emblema del feminismo, en
atención a que ese movimiento tiene muchas expresiones y
manifestaciones, algunas de ellas completamente antagónicas entre
ellas en sus postulados, por lo cual, a mi parecer, no resulta
apropiado atribuirle a todos los movimientos feministas
existentes, a Gabriela Mistral como su emblema.
En lo que se refiere a presentarla como emblema de la disidencia
sexual, es posible que algunas expresiones del feminismo así lo
quieran hacer, pero la evidencia para construir una imagen de la
poetisa como disidente sexual no es absoluta, y en mi opinión, se
basa fundamentalmente en conjeturas y elucubraciones más bien
fruto de la imaginación antojadiza de algunas personas.
¿Por qué ocurre esta resignificación con la Mistral, y no con
otros próceres?
Creo que esta pregunta tiene varias respuestas. En primer lugar,
Gabriela Mistral en su calidad de Premio Nobel, en las últimas
cinco décadas fue desplazada por la figura de Pablo Neruda,
posiblemente por una mayor figuración mediática de este último
debido a su compromiso político - partidista y cuya imagen servía
como propaganda a intereses de índole político. En ese ámbito,
Gabriela Mistral no tuvo mayor figuración política ni mediática.
La resignificación de la poetisa tiene esa primera lectura:
reconocerla en su calidad de Premio Nobel dándole una mayor
figuración ante la sociedad chilena. También, desde una
perspectiva feminista, es posible pensar que quizás hubo una
intención simultánea de opacar la figura de Neruda debido a una
mayor la divulgación de sus actos contra mujeres: el abandono de
su hija y de su primera esposa, y la violación que el mismo
reconoce haber perpetrado a una sirvienta, dos acciones
condenadas no sólo por movimientos feministas.
Una segunda respuesta podría ser la necesidad de algunos grupos
feministas, de buscar un ícono que represente la disidencia,
orientación o diversidad sexual, recurriendo para ello, a una
interpretación de su vida en base, como ya se dijo anteriormente,
a conjeturas y elucubraciones sin mayor sustento.
Una tercera respuesta sería el desconocimiento detallado de la
vida personal de Gabriela Mistral, que permite hacer nuevas
interpretaciones de su figura. A lo anterior se agrega que la
fecha no hay suficientes estudios sobre su obra y la lectura
“entre líneas” de ella, que permitiría inferir dimensiones
desconocidas de su pensamiento. Pero aún así, Gabriela Mistral
seguirá siendo una persona misteriosa y sensible, que rescató el
Chile profundo que sólo un artista puede ver.
¿Por qué no ocurre esta resignificación con otros próceres?
En mi opinión, hay tres posibles respuestas. La primera dice
relación con la conveniencia e interés para algunos sectores de
resignificar sólo a Gabriela Mistral por las razones ya expuestas
anteriormente. Una segunda respuesta sería que de los otros
próceres se sabe mucho o nada y por lo tanto no tendría mucho
sentido hacerlo, y la tercera respuesta sería porque no hay
interés o motivaciones para ello.
¿Qué otros personajes de nuestra historia podrían formar parte de
un nuevo panteón de próceres en el espacio público?
El Diccionario de la real Academia señala dos acepciones para el
vocablo prócer: la primera, como adjetivo: eminente, elevado,
alto. La segunda, una persona de alta calidad y dignidad.
De acuerdo a las definiciones anteriores, para el imaginario
colectivo, en mi opinión la palabra prócer tendría una
significación más amplia. Al parecer, un prócer sería una
persona, nacional o extranjero, que con sus acciones, o con una
sola acción, influyó o impactó, de alguna manera, en la historia
o en la vida de una comunidad, de un grupo específico o de la
nación. A mi entender, un prócer debe ser una persona que inspire
a la ciudadanía y que constituya un ejemplo de las virtudes
propias del ser humano. En ese contexto, referencias para la
busca de próceres, son la presencia, en personas, de algunas de
las constantes propias de la evolución humana, destacándose el
altruismo, la creatividad y la solidaridad.
Creo que lo importante en un prócer, es que sea reconocido por la
comunidad o sector a quien está dedicado; por ello su
proclamación como tal, debe ser muy bien estudiada, así como el
lugar donde se instalará su figura en la expresión artística que
sea. De esa manera, por ejemplo, recientemente se ha inaugurado
una estatua del Piloto Pardo, reconocido por su hazaña del
rescate de la expedición de Shackleton, en Punta Arenas, ciudad
en donde es reconocido y honrado. En otra ciudad, probablemente,
no sería reconocido.
A nivel nacional, estimo que a la fecha no hay figuras
prominentes que no hayan sido reconocidos u honrados. A nivel
comunal seguramente los hay y su recuerdo contribuirá a fomentar
la historia y unión de esa comuna.