Uno de los principales argumentos que presentan los detractores de la nueva constitución, siendo principalmente parte de la derecha chilena, es que creen que al referirnos al concepto de "plurinacionalidad" en la propuesta se limita a Chile, ya que sería "gobernado por pueblos originarios solamente" e incluso comparándose con el país vecino de Bolivia. Pero, una forma de responder a esta crítica que es una de las que más revuelo ha causado, es que deberían preguntarse en primer lugar "¿qué significa un Estado plurinacional?", ya que como bien se menciona en su definición y propuesta es que se le esta entregando el reconocimiento necesario a las diversas naciones que conforman el pueblo de Chile, es decir, tanto su autonomía en tradiciones como el reconocimiento de los sistemas jurídicos de los pueblos y naciones indígenas. Y en segundo lugar, informarse en qué no por tener estas características nuestro país sería conducido por estos pueblos, más bien se les entrega el reconocimiento de existencia y permanencia que siempre tuvo que haber sido, entregándoles la misma posibilidad de participación al igual que cualquier ciudadano y cumpliendo con la deuda pendiente con nuestros país ha mantenido históricamente con los que por años han sido marginados.