Desde la última década del Siglo XX se ha ido
incorporando gradualmente la perspectiva de género en los
acuerdos de comercio internacional. ¿Podría explicar en qué puede
beneficiar concretamente a la mujer trabajadora, esta política
pública global?
La perspectiva de género en los acuerdos de comercio exterior ayudará a que las mujeres empresarias tomen el control y mando de sus finanzas, logrando con ello alcanzar el potencial que poseen, siendo así, mujer libres e independientes económicamente, sin obstáculos que las repriman a ser solo pymes o vendedoras locales.