Realmente las clases de forma online, tanto para profesores, cómo
estudiantes y en realidad cualquier persona que tenga que
desempeñar su trabajo de esta manera, ha sido todo un desafío. De
partida un desafío para quienes de forma rápida, han tenido que
buscar los recursos o ingeniar algo con tal de poder adaptarse a
estos tiempos, lo cual dadas las diferencias económicas o
culturales en el país, son grandes y por que no,
preocupantes.
Sin dudas tiene sus pro y sus contras, u otras que no dejaría en
bajo ningún tipo de juicio, ya que va en cómo lo perciba cada
quien, por ejemplo, cómo futuro docente, me siento casi cómo un
creador de contenidos al más puro estilo de youtube, cosa que me
encanta, pero me pregunto, ¿esto no sería también a su vez, un
atentado a la pedagogía cómo la conocemos? aunque, igual, sólo me
respondo con pros y contras, por que, seamos sinceros, hay mucho
por cambiar, pero sin irme por las ramas... Zoom y meet.
En cuanto a las ventajas, claro hay más oportunidades inmediatas
para mostrar
contenido
audiovisual o acceder a cierto tipo de información de fácil acceso.
Genera otro tipo de metodologías y podría complementarse de forma
más sólida en un contexto previo a la pandemia. Da la oportunidad
de asistir a los trabajos, clases o talleres, independiente del
lugar en que uno se encuentre, nos conecta, pero de una manera un
poco superficial.
Ahora en cuanto a los contras, muchos y muchas docentes han tenido
que experimentar mucho con esto, lo que hace un ensayo y error,
pero muchas veces frustrante para lo que compete nuestro trabajo.
Las horas frente al computador son excesivas y dado el tiempo
permitido para dar clases, no permite que sea una enseñanza más
personalizada, hace que todo sea general, muy por encima, por ende,
los estudiantes no avanzan como quisiéramos. Y bueno, el contacto
humano claramente no es el mismo, hace que todo sea más frío y
digno de series cómo Black Mirror a veces. Y por último, cómo
mencioné en un inicio, no todos pueden acceder a este, o han tenido
que recurrir a formas poco cómodas para poder conectarse a una
clase. Claro ejemplo de cuando los medios de comunicación
romantizan a peques que con "esfuerzo" deben ir a un cerro a quizás
cuantos kilómetros para conectarse y hacer sus tareas, no, eso
claramente no está bien, independiente del número de gente que deba
acudir a esto, es un gran problema.